jueves, 14 de julio de 2016

EL DESPERTAR DE LOS 60 AGUJEROS DE GUIÓN (1ª PARTE)

El artículo que vamos a comentar en los siguientes posts lo podéis encontrar aquí.  Lo que pasa es que para no haceros cambiar continuamente entre las dos páginas voy a copiarlo y a comentarlo en el blog. 

Lo primero que llama la atención es que se traduce “plot hole” por “laguna” cuando el término “agujero de guión” está más que extendido. Más parece que estamos hablando de los síntomas del Alzheimer, pero bueno, tampoco tiene tanta importancia.

Las cursivas, con o sin negrita, son de Abramson. El resto, mío. Vamos allá.

Advertencia: este artículo contiene spoilers importantes de Star Wars: El despertar de la fuerza.

La película me encantó. De verdad.

(Pues menos mal…)

Aun así, tiene más lagunas que cualquier otra película que haya visto, por eso me molesta la recepción que le ha brindado la crítica. ¿Por qué es tan difícil de admitir que BB-8 es adorable, que Finn es tronchante, que Rey es increíble, que volver a ver a Han y a Chewie fue genial, que los efectos especiales son alucinantes, que Poe nos recuerda a Han Solo, que Kylo Ren es enigmático pero que la película en sí no tiene ningún sentido?

(Porque a lo mejor sí que tiene mucho sentido.)

He recopilado una lista de 40 lagunas de El despertar de la fuerza. Algunas son insignificantes, pero la mayoría son inaceptables. Todas son innecesarias teniendo en cuenta el tiempo invertido en hacer esta película, la cantidad de gente que ha trabajado en ella y la suma de dinero que todo el mundo sabía que iba a recaudar. Precisamente por eso son imperdonables.

(No son imperdonables. Son falsas en su gran mayoría. Y es imposible que una película con tantos fallos le pueda gustar a nadie. Así que, o no te gusta, o no hay fallos.)

1. Para destruir la Estrella de la Muerte en Una nueva esperanza, los rebeldes necesitaron elaborar planes detallados para invadirla con éxito, además de la puntería sobrenatural del portador de la Fuerza más poderoso de toda la galaxia. Para destruir la base Starkiller, mucho más grande y mejor protegida, todo lo que se necesitó fue a un conserje sin habilidades de vuelo, unos pocos explosivos, unos cuantos disparos facilones por parte de un caza rebelde y algo de valentía. También ayudó el hecho de que el Halcón Milenario pueda "volar bajo".

Este es un caso flagrante de recuerdos parciales y embellecidos por el tiempo. En Una nueva esperanza a los rebeldes les basta un cuarto de hora para examinar los planos, encontrar un fallo que en 20 años no detectaron los diseñadores de la Estrella de la Muerte, y elaborar a partir de ahí un plan tan detallado que sólo tuvo éxito porque un granjero de Tatooine que le disparaba a ratas de las arenas, sin experiencia de vuelo de combate en ese tipo de nave pero al que permiten pilotar por que sí porque él lo vale, y encima oye voces, es ayudado por la aparición exdeusmachinera de un contrabandista que media hora antes había decidido dejar la Rebelión y, de manera jamás revelada, cambia de opinión porque sí y llega en el minuto justo, porque si llega un minuto después, al carajo la Rebelión.
¡Y sin embargo, -lo digo sin ironía-, qué chulo, y bonito y emocionante  sigue siendo ese final! Mi pregunta es, ¿por qué lo que funcionaba en el Episodio IV no funciona según Abramson en el VII? ¿No será que el problema lo tiene el propio autor que, oh, vaya, ha crecido y ya no ve las cosas con los mismos ojos?

2. El astuto Han Solo pierde el rastro de su posesión más valiosa, el Halcón Milenario, durante muchos años. No tiene ni la más remota idea de dónde está. Si ya es un fastidio perder algo en casa, perder algo en una galaxia tiene que ser... Y, aun así, instantes después de que Rey empiece a pilotar el Halcón Milenario, Han mira por la ventana de su carguero y todo lo que dice es: "Anda, ahí está".

Es que eso no es lo que pasa. Cuando se dirigen al bar de Maz Tanaka, Han advierte que han parado allí porque necesitan una nave “limpia” para transportar a BB-8, ya que si los escáneres del carguero que él tripulaba pudieron localizar al Halcón Milenario, los de la Primera Orden también lo harían, como así pasó. 




Tiene pinta de que al estar la nave inactiva en Jakku durante esos años pasó inadvertida y que en cuanto salió al espacio les resultó facilísimo localizarla.

3. Kylo Ren, un portador de la Fuerza realmente poderoso, lucha en una batalla de espadas láser con un ex conserje que no ha cogido una espada láser en su vida y 1) no utiliza la Fuerza en ningún momento, cosa que le habría dado la victoria inmediatamente; y 2) gana la pelea por los pelos, dejando claro que es uno de los portadores de la Fuerza con menos visión estratégica del Lado Oscuro y que, a pesar de su entrenamiento, no se le da bien pelear con una espada láser. Teniendo todo esto en cuenta, resulta sorprendente que Kylo Ren haya diseñado y construido su propia espada láser.

Kylo Ren está herido por la ballesta de Chewbacca, y aún así no gana por los pelos a Finn, sino con extrema facilidad y en menos de dos minutos. De hecho Finn tiene tan poca pericia que Kylo no necesita la Fuerza para derrotarle dejándole medio muerto.  Por lo demás, nadie dice que sea obligatorio el uso de la Fuerza durante una pelea de sables, y al duelo de Darth Vader contra Obi-Wan me remito. Está claro que Kylo tiene un inmenso poder bruto (es capaz de detener un disparo de bláster en el aire) pero Snoke dice durante la película que su entrenamiento es incompleto, lo cual puede ser la causa de que su espada láser parezca defectuosa, como símbolo del poco control de su poder. 

4. Rey se convierte en una poderosa portadora de la Fuerza en cuestión de horas cuando Luke Skywalker tuvo que entrenar durante años para conseguirlo.

Una cosa es ser un poderoso portador de la Fuerza (el pequeño Anakin lo era) y otra saber usarla. Anakin ya demostró que sin entrenamiento era capaz de ser un piloto de vainas de primera categoría, diseñar androides de protocolo y pilotar naves que él no conocía. Luke aprendió telekinesis de manera autodidacta, cuando desenterró su espada de la nieve en el Episodio V. 
Para usar la Fuerza de manera consciente es para lo que, se supone, hay que entrenar. Sin embargo, ¿quién te dice que Rey no hubiera entrenado como Jedi? ¿No parece que fue testigo –aunque no lo recuerde- de la masacre de la Academia de Luke, tal y como se ve en el flashback que tiene? ¿No estará entonces simplemente recordando su entrenamiento, siguiendo esos instintos de los que tanto hablan los Jedi?

5. Minutos antes de que explotase la base Starkiller, el Líder Supremo Snoke ordena a Hux que rescate a Kylo Ren. Desafortunadamente, Ren se había adentrado en el bosque corriendo como un loco (algo que Hux desconocía) sin informar a nadie de su paradero. Pero eso no supone ningún problema: Hux parece tener un GPS especial para localizar a Kylo Ren y (supuestamente) consigue llegar hasta el punto exacto en el que Ren se está desangrando en el bosque; si no, Ren habría muerto en el planeta junto con el resto de la Primera Orden.

A esto se le llama inventárselo todo. Lo único que aparece en la película es la frase en negrita. Lo último que vemos de Kylo es que está herido al otro lado de la brecha que le separa de Rey. No se ve si le salvan o no, aunque todos suponemos que sí. Y bastaría con que él tenga un aparato de radio o similar para que den con su localización. Es una explicación plausible a un problema que ni es un agujero de guión ni es en absoluto relevante para la película.

6. La razón por la que Ren se desangraba lentamente -en vez de haber muerto a manos de Rey- es que se había abierto mágicamente una brecha enorme entre los dos. ¡Qué mala suerte, Rey! (Maldita seas, geología divina).

Rey derrota a Kylo y lo deja tendido, malherido. En ningún momento parece que ella tenga intención de matarlo a sangre fría. Y sí, la brecha es tan "oportuna" como simbólica de la separación que hay entre ambos lados de la Fuerza. 
Abramson, hijo, para ser poeta qué mal se te dan los símbolos y las metáforas.

7. Rey, que nunca había abandonado su planeta, sabe hablar Wookie. Nadie sabe hablar Wookie (es un chiste recurrente en el universo de Star Wars). Pero el hecho de que Rey pueda hablarlo no sorprende a Han Solo, ni a Chewbacca, ni a ella misma.

¿Quién te dice que Rey nunca ha abandonado su planeta (Jakku) si, lo que parece estar claro en el flashback en el castillo de Tanaka, es que no es de Jakku? ¿Quién te dice que anteriormente no hubiera aprendido wookie? Pero no elucubremos, vayamos al hecho que es ¡que Rey no habla wookie!, ¡Rey entiende wookie  como el 90% de los personajes que aparecen en Star Wars! Menos Finn, por cierto, que demuestra así el estado de aislamiento en el que ha vivido en su división Stormtrooper.

8.   Nadie se sorprende de que Poe sobreviviera al accidente del caza porque, después de todo, hasta Finn había sobrevivido. ¿Existe alguna película en la que 1) se dé la impresión de que un personaje ha muerto y 2) a nadie le sorprenda que aparezca vivo después? Ni siquiera a Finn parece importarle mucho cómo consiguió sobrevivir Poe.


Los únicos que saben del accidente en Jakku son Finn y Poe (y la Primera Orden, pero a estos efectos, ellos no cuentan). Así que nadie aparte de Finn se puede sorprender de que Poe sobreviva a algo que todos los demás desconocen que haya sucedido. La película no te cuenta los detalles, pero Poe se apaña para regresar desde Jakku al planeta de la Resistencia y allí habrá contado con más o menos detalle cómo lo ha hecho. (Cuando le presentan Finn a Leia ella ya sabe de él y lo que ha hecho). 
Sea como sea, la importancia de esto para el desarrollo de la película es nula. Los hechos son que Finn sí que se sorprende de que haya sobrevivido, se alegra un montón, sí que le importa cómo lo hizo, sí que se lo pregunta y sí que Poe le cuenta que él también fue eyectado del caza TIE, todo  ello en un reencuentro emotivo que ha dado lugar a más de una coña. 


Continuará...

2 comentarios:

Pablo G. Naranjo dijo...

Con esta peli, como estás mostrando en estos post, se ha sido más exigentes que con ninguna otra.

José Enrique Machuca dijo...

Había muchas expectativas en ella, pero al espectador medio le ha encantado. Luego tenemos a los voceros que no sé que querían o esperaban y lo que sí he visto es muchísimo afán en encontrarle fallos al guión que tampoco son para tanto.