Sinergia es una de esas palabras-clave que tanto les gustan a los economistas y gentes de marketing. La idea es crear una serie de productos que se promocionen unos a otros para que el beneficio total sea mayor que si cada uno fuera por su cuenta. Ejemplito sencillo: Burguer King hace muñequitos de Los Simpson para que los niños que vienen de ver la película se hinchen de hamburguesas por conseguirlos y, por otro lado, la promoción que de esos muñequitos hace la hamburguesería es publicidad para la película y ocasiona un buen puñado de entradas vendidas más. Este sistema le funciona a todo el mundo menos a los que hacen tebeos.
Joe Quesada, al principio de su carrera como Editor de Marvel, criticaba a DC diciendo que si él contara con una serie de tv al estilo Smallville –un exitazo en aquel entonces-, la aprovecharía al máximo para aumentar las ventas de los comics. Desde entonces ha tenido unos cuantos Spidermanes, Blades y 4 Fantásticos, y si las ventas de Marvel han aumentado, que lo han hecho, no ha tenido nada que ver con esas películas sino por Millar, Bendis o Straczinsky.
Los comics son una de las principales fuentes de inspiración del cine de consumo masivo americano. Sus personajes más icónicos son fácilmente reconocibles por el gran público y los productores al fin se han dado cuenta de que la fidelidad al original es una de las claves del éxito. Sin embargo ese gran público no se siente atraído por unos tebeos de numeración centenaria y líneas argumentales que se pierden en el alba de los tiempos. Y aunque sintieran tal atracción les sería difícil encontrarlos porque los tebeos hace ya mucho tiempo que en EEUU se retiraron al gueto de la librería especializada.
Yo diría que el último gran ejemplo de sinergia en EEUU fue la batmanía del año 1989, que sí impulsó las ventas del personaje e inició una fase de ascenso para la industria en general. Pero era una época en la que los tebeos aún se vendían en quiosco. Casos excepcionales podrían ser los Sin City y 300 de Frank Miller o la obra de Harvey Pekar a raíz de la película American Splendor, que se distribuyen en librerías normales.
En general, el beneficio para las editoriales y autores, en su caso, consisten en unos jugosos royalties, pero no en aumento de ventas. En España sí hay intentos de sinergia, sobre todo por parte de Planeta con sus coleccionables de 4 Fantásticos, Punisher o Superman, productos dirigidos a quiosco y que coincidieron con estrenos cinematográficos, mientras que Norma presume de 30.000 ejemplares vendidos de 300.
Así que, sobre todo en EEUU, de sinergia, na de na. Sin embargo los caminos de la sinergia son oscuros y tortuosos.
Joe Quesada, al principio de su carrera como Editor de Marvel, criticaba a DC diciendo que si él contara con una serie de tv al estilo Smallville –un exitazo en aquel entonces-, la aprovecharía al máximo para aumentar las ventas de los comics. Desde entonces ha tenido unos cuantos Spidermanes, Blades y 4 Fantásticos, y si las ventas de Marvel han aumentado, que lo han hecho, no ha tenido nada que ver con esas películas sino por Millar, Bendis o Straczinsky.
Los comics son una de las principales fuentes de inspiración del cine de consumo masivo americano. Sus personajes más icónicos son fácilmente reconocibles por el gran público y los productores al fin se han dado cuenta de que la fidelidad al original es una de las claves del éxito. Sin embargo ese gran público no se siente atraído por unos tebeos de numeración centenaria y líneas argumentales que se pierden en el alba de los tiempos. Y aunque sintieran tal atracción les sería difícil encontrarlos porque los tebeos hace ya mucho tiempo que en EEUU se retiraron al gueto de la librería especializada.
Yo diría que el último gran ejemplo de sinergia en EEUU fue la batmanía del año 1989, que sí impulsó las ventas del personaje e inició una fase de ascenso para la industria en general. Pero era una época en la que los tebeos aún se vendían en quiosco. Casos excepcionales podrían ser los Sin City y 300 de Frank Miller o la obra de Harvey Pekar a raíz de la película American Splendor, que se distribuyen en librerías normales.
En general, el beneficio para las editoriales y autores, en su caso, consisten en unos jugosos royalties, pero no en aumento de ventas. En España sí hay intentos de sinergia, sobre todo por parte de Planeta con sus coleccionables de 4 Fantásticos, Punisher o Superman, productos dirigidos a quiosco y que coincidieron con estrenos cinematográficos, mientras que Norma presume de 30.000 ejemplares vendidos de 300.
Así que, sobre todo en EEUU, de sinergia, na de na. Sin embargo los caminos de la sinergia son oscuros y tortuosos.
Más sobre eso en el próximo post
10 comentarios:
Puede que no funcione ese efecto sinérgico en los tebeos (y yo creo que sí, en vista de los neófitos que se van integrando en las tiendas especializadas, gracias al interés por los tebeos iniciado en el cine), pero desde luego funciona claramente en el merchadising, ya que los muñequitos de héroes y superhéroes de cómics se están vendiendo bastante mejor (según estadísticas de las 3 tiendas que frecuento), como ejemplifica mi hijo, y eso que a mí no me atrae el coleccionar muñecos, pero sobre gustos...
Yo creo que las mayoría de nuevas incorporaciones son, sobre todo, por parte del manga y el anime, los Naruto y compañía
La parte de los muñequitos suele ser merchandising de la peli más que de los tebeos, y la sinergia se produce, como bien dices, entre cine y muñecos, mientras que los tebeos, que son los que originaron todo, se quedan a dos velas.
Yo tampoco soy de muñecos, ni de camisetas ni merchandising similar. Bastante espacio ocupan los tebeos. Tengo amigos que son auténticos enganchados a comprar muñecos, así que ten cuidado con el nene, que empieza con una figurita de plástico de spiderman de los chinos y acaba pidiendo estatuas a escala 1:12 de porcelana firmadas y numeradas de 500 euros.XD.
Los videojuegos, amigo. No ya en las películas, que siempre las ha habido, pero por oleadas. Lo de los videojuegos es lo que le da sentido a eso de la sinergia. Que sí, que lo de la batmanía fue una auténtica burrada, incluso para los estándares de marketing y merchandising de hoy en día, pero el dinero que mueven los videojuegos (menos para los que los crean) es brutal, y eso es un flujo, no una oleada. Y cada vez mayor. Si en las ediciones de DVD de las películas de tebeos regalan tebeos para enganchar y no para otra cosa, en los videojuegos de esas pelis y de esos tebeos hay cada vez más atractivos para los fans y los no fans. Y sin tener que regalar tebeo previamente editado.
Halo 3 es un bonito ejemplo de sinergia: ha vendido millones de juegos en pocos días y ha hecho que mucha gente que no se decidía a comprarse la xbox lo haya hecho. Y una vez que tienen consola para jugar al Halo, qué menos que comprarse otros juegos.
De topdas formas, aunque se hacen muchos videojuegos basados en tebeos, tampoco en este caso aumentan las ventas de los mismos.
Hoy, por cierto, he visto la novela gráfica de Halo, que ha sacado Panini. Y no, la sinergia no ha funcionado conmigo. Seria interesante saber cuántos jugones habituales se han comprado ese tebeo.
En este tema sí podría darnos más datos el Sr. Fitetú, porque en cuestión de videojuegos si me sacan de las recopilaciones MAME 32 o la serie Quake... más perdido que el barco del arroz.
Varios libreros sí que notan cierta subida de ventas en cada peli de estreno relacionada, como en el caso de 300, V de Vendetta, Sin City, y tantos otros; incluso The Spirit encuentra un renovado interés ante la futura película. Sin embargo, habría que afinar más la cuestión de la clientela que engrosa las cifras, si son los veteranos de siempre o nueva sangre.
Procesando... bip... bip.
Calla, loco, no provoques al Gaby nombrando al MAME y al Quake, XD. Su público, Sr. Fiteblog.
La sinergia sí funciona bastante bien en obras como las que nombras, que son autoconclusivas y tienen un formato "regalable" y se siguen vendiendo de manera regular aunque pase cierto tiempo del estreno del peli correspondiente. Podríamos hablar de "resonancia de la sinergia". Mejor no, jajaja. Ayer mismo quise comprar un tomo de From Hell para regalar pero me dijeron que les habían llegado dos la semana anterior y que se habían agotado.
Y hablando de regalos ¿alguien ha visto cómo está por dentro el Compendium de Crisis en Tierras Infinitas? Por fuera tiene buena pinta, pero son 45 lerus...
¿Te refieres a la edición esa "absolute"?. Pues yo precisamente el mes pasado hice la elección entre los dos tomazos gigantes (45 pavos) o el tomo de Norma (25 loros). Al final me decanté por el de Norma, no ya por el precio (utilizando tus propias palabras, ya que coincidimos: "desde que gano pasta, no me fijo en los precios") pero sí por la relación precio-contenido; no soy lector de libros, soy lector de TEBEOS (orgulloso de serlo), y el segundo tomo gigante tiene demasiado relleno para mi gusto. Así que los 20 euros de diferencia también los utilicé en más tebeos, por supuesto. Una cosa es un artículo, una reseña o cualquier comentario, que siempre es grato, y otra es tragarme mogollón de páginas sin bocadillos... a eso me resisto más.
Para desarrollos teórico-analíticos ya tenemos este y otros foros, todos interesantes y gratuitos.
Un saludo.
Gracias por el consejo. La verdad es que a mí esos apéndices que desentrañan la realización del tebeo me gustan mucho. Bueno, ya veremos.
Interesante artículo. Estoy de acuerdo en que tal vez sea el manga el que más sinergia consiga pero mucho más por las versiones en anime que por el manga en si, obviamente.
Y los coleccionables de quiosco es bueno que existan aunque sea en momentos puntuales, otra cosa es la calidad de los cómics elegidos para esas colecciones que no siempre son los mejores o más memorables pero mientras haya quien con ellos se aficione a la lectura pues genial.
Bola de Dragón es el paradigma de sinergia mangaka. El manga salvó a la sección de tebeos de Planeta o, al menos, a alguno de los mandamases allá por el 92. Y la serie de tv hizo más por los idiomas autonómicos que cualquier plan de normalización lingüística.
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