LA ERA MARVEL DE LA DIVERSIDAD (II)

Anteriormente en este blog:

David Gabriel, Vicepresidente de Ventas de Marvel: "Lo que hemos escuchado es que la gente no quiere más diversidad. No quieren personajes femeninos. Eso es lo que hemos escuchado, nos guste o no. No sé si eso es realmente cierto, pero es lo que vimos en las ventas. Lo que vimos en las ventas de cualquier personaje diverso, o nuevo, nuestros personajes femeninos, cualquier cosa que no sea un personaje Marvel central, es que la gente no los aceptaba. Eso fue difícil para nosotros porque teníamos un montón de ideas nuevas, frescas y excitantes y nada nuevo realmente funcionaba."

Y si bien era cierto que las ventas de Marvel habían bajado, también lo es que Gabriel, había hablado específicamente de que esos cómics diversos no vendían lo suficiente. Para ver quién tenía razón, si el que tenía los datos (y los podía manipular) y los que no los tenían, (pero teorizaban igual) lo mejor es, como siempre, ir a los datos.

INSTRUCCIONES DE USO

Lo que tratamos de ver es si realmente las ventas de las series de personajes "diversos" han sido peores que las de sus predecesoras con los personajes de toda la vida. En ocasiones incluso ambos personajes tuvieron series publicadas a la vez, lo cual puede ser aún más esclarecedor. También le echaremos un ojo a personajes sin posibilidad de odiosas comparaciones como Ms. Marvel o Moon Girl.

Como referencia he usado Comichron.com  que se basa en los datos de la distribuidora a librerías especializadas Diamond. No incluye las ventas digitales, ni he tenido en cuenta las ventas de los tomos recopilatorios, sino las de los comic books, que siguen siendo el principal canal de venta, aunque su importancia vaya disminuyendo.

Cada dato de cada gráfica ha sido recopilado manualmente. Como algunas gráficas abarcan 4 años y en ellas aparecen varias colecciones a la vez, sólo he hecho series consecutivas de datos en periodos puntuales que he considerado interesantes, y para ver tendencias he usado datos aislados separados por varios meses entre sí.

Lo normal, al menos en los últimos años, es que una serie nueva vea rebajada a la mitad sus ventas entre el primer y el segundo número y que luego vea estabilizadas sus ventas en una tercera parte de las conseguidas por dicho primer número. Es una tendencia casi universal, como veremos enseguida. También es normal que las ventas vayan decreciendo paulatinamente, lo cual explica que Marvel (y también DC) relancen sus series cada tres o cuatro años. O a veces cada año, como también veremos en algún caso.

Y para que sirva de referencia, Batman siempre suele estar en las primeras posiciones de ventas, sólo desbancanda por el primer número de algunas series muy esperadas o por los eventos de turno, que si Secret Wars, que si Rebirth, que si Metal,... (Sí, Metal, su número 1 sobrepasó los 250 000...). Un número normal de Batman suele vender poco más de 100 000 ejemplares. La zona de confort está entre los 40 000 y 60 000, mientras que las series al final del top 100 se mueven alrededor de los 22 000. Generalmente bajar de los 15 000-12 000 suele suponer la cancelación si la serie es de Marvel o DC. Si es de otra editorial corre el champán y la algarabía. También depende del personaje: Spiderman vendiendo menos de 50 000 haría sonar todas las alarmas.

Pinchando en las gráficas se pueden ver a mayor tamaño.

MAELSTROM DE GRÁFICAS 

Vamos a empezar con el Capitán América. Los últimos números de la loca etapa de Remender rondaban los 30 000 números mientras que la elección de Sam Wilson como sucesor alcanzó 74 183 y su nueva serie 120 500 para enseguida estabilizarse alrededor de los 40 000. El parón de Secret Wars provocó un relanzamiento con 62 535 ejemplares vendidos que sin embargo no pudo disimular un desplome de ventas inferior a 30 000 ejemplares por número. El nº 12, Especial 75 aniversario, tuvo un pico de ventas de 54 881, muy poco para una efeméride así, pero claro, es difícil a celebrar el 75 aniversario de un personaje que en ese momento no tiene serie propia.

Justo un par de meses después Steve Rogers rejuvenece, protagoniza su propia serie y se vuelve agente de Hydra siendo recompensado todo ello con 99 786 ejemplares. El desplome habitual no oculta que esta serie, protagonizada por un nazi, vende bastante más que la protagonizada por un hombre de color concienciado. ¿Significa que el lector americano medio es nazi? Probablemente significa que el lector medio prefiere historias divertidas, aunque ni en una ni en otra Nick Spencer se lució. Las ventas de la serie de Sam Wilson, que no llegaban a los 20000 auguraban su cancelación, que sucedió coincidiendo con el final de Imperio Secreto. El retorno del Capitán América clásico tuvo su correspondiente repunte para luego volver a los 35 000 de media, mientras que el Halcón tuvo una efímera serie cuyos últimos números apenas llegaban a los 8 000 y que ha sido consecuentemente cancelada. Y justo cuando le iba a dar al botón de "Publicar" veo que la nueva serie del Capitán a cargo de Ta-Nehisis Coates ha vendido 167 414, 45 000 más que el mejor de los datos que hemos analizado.

Así que sí, yo diría que, en este caso, la tesis de que la "versión diversa" no vendía lo suficiente es cierta.

Sigamos con Thor. La serie de Jason Aaron con Thor estaba consolidada alrededor de los 38 000 pero el anuncio de la nueva versión sobrepasó los 150 000 ejemplares vendidos, para luego seguir alrededor de los 70 000... Hasta que llega Secret Wars. Esto va a pasar mucho. El relanzamiento alcanzó unos meritorios 112 053 ejemplares pero la serie fue estabilizándose alrededor de los 43 000 ejemplares. Lo curioso es que la miniserie de El Indigno Thor, sin ser un pelotazo, sí que vendió más que la serie regular, ya fuera por ser un evento cerrado o porque había ganas de un Thor rubicundo coincidiendo con el estreno de Thor Ragnarok.

Sea como sea, en este caso parece que el reemplazo del personaje no afectó a las ventas, aunque también hay que tener en cuenta que la historia estaba perfectamente planificada por Aaron desde el principio para que Thor Odinson volviera, cosa que hizo con un nuevo número 1 (sí, tres números 1 en menos de cuatro años) que ha vendido poco más de 100 000 ejemplares en junio (Es el puntito de la derecha).

Visitemos al único mutante que sigue importando, Lobezno. A simple vista este gráfico es un chisgarabís de etapas y series. Con la noticia de la muerte de Logan las ventas casi alcanzaron los 50 000, aunque lo que dio el pelotazo fue la miniserie Death of Wolverine con una media de casi 200 000. La mini en la que los Lobeznos derivativos compartían aventuras no fue nada bien, pero la serie con Laura de protagonista arrancó con unos prometedores 119 786  aunque muy pronto se situó alrededor de los 40 000. Justo un mes después Old Man Logan cubría la cuota de superhéroe jubilado y, aunque su inicio no fue tan bueno (104 362) sí que se situó siempre 10 000 ejemplares por encima de la serie de Lobezna salvo cuando se estrenó la película de Logan en la que ella era coprotagonista. (O sea, que aquí la sinergia sí funcionó). El declive para ambos ha sido muy pronunciado y, a la espera de la vuelta del Logan de toda la vida, las ventas se han ido bajo los 30 000 ejemplares. Laura estrenó serie en julio con su antiguo nombre, X-23.

Pues aquí parece que las ventas no han sido mejores y, además, la versión más cercana al personaje original vendió más que la versión femenina.

Hulk es uno de esos personajes con los que Marvel no parece muy bien qué hacer. Tras finiquitar la colección de Banner, que rondaba los 28 000 ejemplares, y tras, cómo no, Secret Wars, el nuevo Hulk es Amadeus Cho, de origen coreano y el séptimo ser humano más inteligente. Unos no demasiado prometedores 74 471 ejemplares condujeron en pocos meses a, por supuesto, la tercera parte. En diciembre de 2016 la serie de Hulka llamada Hulk (sí, el lenguaje inclusivo no podía faltar, aunque en el nº 12 la serie se rebautizó como She-Hulk) comenzó con unos excelentes 89 810, que se desplomaron hasta los 15 000 de media, quedando por debajo de la serie de Cho la mayoría de meses hasta su cancelación en mayo de este año.

En este caso también las nuevas versiones vendieron menos que la clásica, y además la versión femenina menos que la del mazacote verde.

Curiosamente Iron Man es el personaje que más tardó en ser sustituido, en este caso por una encantadora adolescente afroamericana, Riri Williams, una genio en ingeniería. Tony Stark tuvo dos series justo antes de la entrada de Riri, la regular, adjetivada Invincible, que rondaba los 48 000 ejemplares, y una efímera miniserie, International. Tras su "muerte" en Civil War II otras dos series tomaron el relevo, una protagonizada por el Doctor Muerte, Infamous, y una nueva Invincible protagonizada por Riri. Pronto los 97 713 ejemplares del número 1 pasaron a una media de unos 33 000 (la tercera parte, como suele ser habitual). Al menos la serie del Doctor Muerte siempre fue un poco por debajo de la de Riri. Y recordemos que ambas fueron escritas por Brian Bendis que al fin pudo poner la cara de su hija a un superhéroe. Lo que no haga un padre...

En todo caso, de nuevo la versión diversa vendió bastante menos que la versión clásica. Y la nueva serie Tony Stark Iron Man (ahí, que se sepa quién manda) se ha catapultado a los 135 727 ejemplares (el puntito azul de la derecha). Parece que a Tony se le echaba de menos.

Y, ¿qué tal les ha ido a personajes que no son directamente derivativos de uno anterior? Ms. Marvel, la maravillosa creación de G. Willow Wilson, tuvo uno inicios discretos, apenas 50 286 ejemplares que auguraban una estabilización alrededor de los 17 000. Sin embargo, y justo hasta Secret Wars, las ventas no bajaban de 30 000. De hecho esta serie tuvo el privilegio de no ser puesta en hiato durante el evento, aunque sí renumerada. Ese nuevo nº 1 se celebró con 79 222 ejemplares vendidos, aunque luego las ventas bajaron a niveles usuales, con un lento declive que hace que actualmente la serie roce los 14 000 ejemplares. En una entrevista le leí a Wilson quejarse en cómo estos eventos dañan a las series, y es cierto, pero no creo que este sea el caso precisamente. En fin, tras confirmarse que Wilson escribirá Wonder Woman (¡bien!) la escritora ha dicho que seguirá con Kamala (¡BIEN!). Ojalá.

Moon Girl y el Dinosaurio Diabólico es una delicia de tebeo que ha contado con Amy Reeder como guionista, uno de los talentos femeninos más reivindicables de la industria yanqui (echadle un ojo a Rocket Girl) y los dibujos de Natacha Bustos. Un tebeo infantil, casi un producto de nicho, que siempre ha tenido una carrera comercial modesta, desde los 38 133 de su primer números a bajar de los 10 000 apenas un año después. En estos momentos vende alrededor de 8 000 ejemplares. ¿Peligro de cancelación? Tanto en este caso como en el de Ms. Marvel las series se publican en tomos que están teniendo una muy buena aceptación.

Pantera Negra no tenía serie propia desde 2012, una etapa en la que la Reina de Wakanda era Shuri (o sea, ella era la Pantera Negra adelantándose un par de años a la tendencia que estamos estudiando) y T'Challa sustituía a Daredevil en la Cocina del Infierno. En 2016 el reputado novelista negro Ta-Nehisi Coates toma el personaje coloca el nº 1 de la nueva serie en el más vendido de abril de 2016 con 253 259. El segundo número se queda en la tercera parte de ventas y pronto empieza un declive que la lleva a una media de 24 000. Ni una renumeración (y van...) ni el estreno de la película ni una nueva serie la han sacado de esos niveles.

¿Y los grupos? Porque, por supuesto, hubo un grupo de, llamémosles así, "Vengadores Diversos" en una serie titutlada All New All Different Avengers compuesta por Capitán América Wilson, Thor Foster, Iron Man Stark y La Visión tutelando a los adolescentes Ms. Marvel, Spiderman Morales y Nova.Es justo tras Secret Wars y la etapa de Hickman. Las ventas bajan rápidamente y el experimento acaba un año después. La verdad es que las series que la continúan, ya sin los chicos, van un poco mejor, pero apenas.

El siguiente paso lógico es darle serie propia a los principales héroes adolescentes, que toman el nombre de Campeones. El primer número tiene unas ventas brutales de 328 165 ejemplares, pero en pocos meses se quedan en alrededor de 20 000 y bajando.

La bajada de ventas en 2017 tras cinco años de subidas fue generalizada en toda la industria americana, especialmente en los comic books (naranja), pero también en novelas gráficas (verde), mientras el mercado digital (rojo) se mantuvo estable.

Fuente: ICv2 y Comichron

Incluso las series regulares más vendidas de las tres primeras editoriales sufrieron unas considerables bajadas, algunas de más del 20% como indican las líneas de tendencia punteadas.

Así que podemos concluir que sí, que las series con personajes diversos no vendieron bien, aunque culparlas del declive de ventas de Marvel o de la industria sería muy arriegado. Pero culpables o no, colaboraron a ello. Y de lo que se trataba era de vender, no de difundir mensajes positivos. Eso era un fin loable, pero también un medio para vender. Y no lo digo yo, lo dijo la revista Fortune en una entrevista a Axel Alonso que salió publicada justo durante los días en los que David Gabriel soltó lo suyo:

La estrategia de diversificar personajes tiene más que ver con los  negocios que con la  política.

Mañana acabamos con análisis de causas, razones, oportunidad y consecuencias.