domingo, 13 de septiembre de 2009

VIDAS PARALELAS

Tener un blog de tebeos y no hablar de las últimas movidas de Marvel y DC es como si el Marca no sacara a Cristiano Ronaldo. Sin embargo este es un tema en el que, ahora mismo, poco podemos hacer salvo especular. Lo propio en estos casos es el “esperar y ver” que dicen los yanquis. Aún así, y a vuelapluma:

Coincidencias de la vida. Que los cambios en Marvel (su compra por Disney) y en DC (nueva Presidenta y transformación en DC Entertainment) hayan ocurrido casi a la vez es pura coincidencia. Esas cosas se cocinan en secreto y a lo largo de meses, si no años. En todo caso ambas responden al deseo de encontrar nuevas ideas y campos de explotación. Y aunque parezca mentira el de los superhéroes es un terreno muy poco explotado.

Los personajes. Disney no ha comprado Marvel Comics. Bueno, sí, pero lo que ha comprado son los 5000 personajes de Marvel. Bueno, sí, pero tampoco. Ha comprado los 50 o 100 personajes más populares y reconocibles y pretende exprimirlos de todas las maneras posibles: películas, series, merchandising, parques temáticos, Happy Meals,… En ese sentido la parte editorial del negocio es sólo la generadora de ideas y conceptos, pero no la más interesante económicamente. Es la misma razón por la que Disney compró Pixar por 6000 millones de dólares. Si ese negocio sólo dependiera de la recaudación de la película anual, lo amortizarían en unos 30 o 40 años.

Lo más interesante es que en Pixar han respetado a los creadores y por eso mismo no espero grandes cambios (más bien ninguno) en el staff marvelita mientras las ventas sigan bien. Que no cunda el pánico.

En el caso de DC la nueva Presidenta, Diane Nelson, ha dicho que tampoco va a tocar la parte editorial (¿ni a Didio, Diane?) y que sus planes son, también, sacar el máximo rendimiento a los personajes de la compañía. Se trata de la persona que consiguió los derechos de Harry Potter para Warner y ha supervisado unos taquillazos que además han dejado satisfechos a los millones de fans del personaje. Buena señal. El caso es que el filón Potter se acaba en un par de años y hay que buscar nuevos yacimientos.

Las pelis. Nos espera una invasión de películas superheroicas. En Warner deben pensar que si el poco popular Iron Man fue un éxito, también lo pueden ser Green Lantern, Flash, el Capitán Marvel,… Y probablemente sean películas dignas. Hace años los productores de Hollywood justificaban sus sueldos comprando derechos de personajes y cambiándolos. La cagaban, claro. La norma ahora es el respeto a la esencia, que se han dado cuenta que funciona en taquilla. Ya era hora.

Disney lo tiene más complicado, porque Marvel, antes de meterse a productora, vendió los derechos de sus personajes más populares a distintos estudios. Columbia tiene a Spiderman, Fox a Los 4 Fantásticos, X-Men y Lobezno, Regency a Daredevil… Por eso Marvel produjo directamente Iron Man, no porque sea un personaje muy chulo, sino porque era el más chulo de los que tenía disponibles. El problema es que los estudios, por contrato, retienen los derechos mientras sigan produciendo películas. La solución es esperar a que el plazo máximo para realizar las películas se agote o bien recomprar los derechos, que es lo que Marvel hizo con los de Hulk, que eran de Universal. Me da a mí que Columbia no va a soltar fácilmente a Spidey , que habrá secuelas de Lobezno y que los rumores de un relanzamiento de los 4F van a ser ciertos.

Los tebeos de Marvel y DC. La fama de ñoña que tiene Disney ha hecho temer una infantilización de los contenidos de Marvel, o la desaparición de líneas como Max (¿aún existe?) o Icon. Sin embargo no recordamos que Disney es un grupo de empresas que incluyen Miramax, productora de las primeras películas de Tarantino o de Kevin Smith, o la cadena de televisión ABC, que emite Mujeres Desesperadas o Perdidos entre otras. También ha habido preocupación sobre la línea Vertigo de DC pero el peligro sería, sobre todo, comercial, no por contenidos. Warner es la propietaria de HBO, ya sabéis, Los Soprano, A dos metros bajo tierra o True Blood, que, como diría Gloria Fuertes “no son para los niños”. A lo mejor hasta se animan a hacer Preacher, algo que desestimaron el año pasado por “oscura y de temática religiosa polémica”. Película sí que se prepara, dirigida por Sam Mendes.

No hace falta que venga nadie de fuera para que Marvel y DC hayan tenido sus propios casos de censura, como cuando prohibieron que Lady Di apareciera como personaje en X-Static, o esos tebeos convertidos en pulpa porque Paul Levitz pensaba que sus contenidos no eran apropiados para el público al que iban destinados. El mismo Levitz que, sin embargo, apoyaba la línea Vertigo aunque no le gustaban los tebeos que publicaba.

Así que no espero cambios salvo que echen a Quesada (¡no!) o a Didio (¡sí!).

Los tebeos de Disney. En EEUU sólo se publican en la actualidad series de Gárgolas (por Slave Labor Graphics), Los Increíbles, Los Teleñecos y Cars (por Boom!). No ha habido comentarios sobre posibles cambios o si Disney usará a Marvel para relanzar una línea de tebeos que hacía años que no funcionaba. Sí que los he oído a santo de que Planeta publica Disney en España y Panini hace lo propio con Marvel y que eso era conflictivo. Ni de lejos. De la misma manera que no lo es que Norma publique Wildstorm, que es un sello de DC. Nada, nada, ni caso. Mientras dure el contrato o Planeta se canse, Disney va a seguir como hasta ahora en España.

Los chistes. No necesitamos chistes de Spidermouse, de Namor liándose con La Sirenita o de los Golfos Apandadores como sicarios de Kingpin. Eran graciosos cuando era imposible. Ahora no tiene gracia. Así que no mentéis a la bicha, insensatos.

Oú, menos mal que no quería escribir sobre el tema. Más, probablemente, en el futuro. Pero el futuro no es hoy.